El vino es una bebida que se presta a la elegancia y al ritual, incluso en los detalles aparentemente simples, como sujetar la botella al servir. En este artículo, exploraremos la forma correcta de sujetar una botella de vino para añadir un toque de sofisticación a tu experiencia vinícola.

1. Eligiendo la Botella Correcta

Antes de sumergirnos en la forma de sujetar la botella, es importante destacar que la elección de la botella adecuada es el primer paso para un servicio elegante. Asegúrate de seleccionar una botella de vino que se adapte al momento y al vino que vas a servir.

2. La Sujeción Correcta de la Botella

Sujetar la botella de vino adecuadamente no solo es un gesto de respeto hacia la bebida, sino que también evita derrames y permite un servicio más preciso. Sigue estos pasos para sujetar la botella con gracia:

1. Coloca la botella en la mesa: Antes de abrir la botella, colócala en la mesa frente al comensal al que se le servirá primero. La etiqueta del vino debe estar visible y apuntando hacia el invitado.

2. Retira la cápsula: Utiliza un corta cápsulas o una navaja especializada para retirar la cápsula que cubre el corcho. Hazlo con cuidado y sin apresurarte.

3. Limpiar el cuello de la botella: Utiliza una servilleta o un paño limpio para limpiar cualquier residuo de polvo o cápsula que pueda haber caído en el cuello de la botella.

4. La Sujeción en la Apertura: Para abrir la botella, sostén el cuerpo de la misma con una mano mientras giras el sacacorchos con la otra. Mantén la botella recta y estable. Evita sostenerla por el cuello, ya que esto puede hacer que el vino gotee o que la botella se vuelque.

5. El Desprender del Corcho: Con el corcho retirado, sostén la botella firmemente con la base apoyada en la palma de tu mano y el dedo índice en la parte inferior del corcho. Gira la botella ligeramente mientras retiras el corcho con suavidad para evitar que se rompa.

3. El Servicio con Elegancia

Una vez que el corcho ha sido retirado con éxito, es hora de servir el vino con elegancia. Mantén la botella por la base, con el dedo índice dentro del hueco del fondo. Esto proporciona un control total sobre el flujo del vino y evita que se derrame o gotee.

4. El Giro Final

Cuando sirvas el vino en la copa, realiza un giro final para evitar las gotas que puedan quedar en el cuello de la botella. Esto también permite que el vino respire un poco antes de llegar a la copa.

Sujetar una botella de vino de manera adecuada es un gesto que muestra respeto por la bebida y agrega un toque de elegancia a cualquier ocasión. Con estos pasos simples, puedes mejorar tu experiencia al servir vino y deleitar a tus invitados con un servicio impecable. Recuerda siempre disfrutar de cada momento y brindar por la belleza del vino. ¡Salud!